"Descendió entonces las gradas del Templo, y el pueblo le seguía. Y llegado a su barco se mantuvo de pie sobre cubierta. Mirando de nuevo al pueblo, alzó la voz y dijo:
Pueblo de Orfalís: El viento me ordena dejaros. Aunque tengo menos prisa que el viento, debo irme.[...] Breves fueron mis días entre vosotros, más breves aún las palabras que os dije. Y con el corazón más lleno, y unos labios más obedientes al espíritu, volveré a hablaros."
El Profeta de Gibrán Jalil Gibrán
Esta sensación... Esta experiencia está siendo la destreza de mi vida, a pesar, de todos los pesares. Aterrizar en un país lejano. Estudiar una carrera universitaria. Costearme en cierto modo mi propia manutención. Salir adelante. Conocer amigos. Averiguar curiosidades de otras culturas. Descubrir un mundo inaudito en Siria. Arriesgar. Percibir el peligro. El miedo al fracaso. Oh, los efectos del estrés. El temor de decepcionar a tus padres. El afán por satisfacer a tu familia. La empatía con tus allegados desde la lejanía. El sufrimiento en silencio. El agobio del estudiante "Ay que no me lo sé y mañana es el examen". El intento de caer bien a todos. El ser juzgado por pertenecer a una determinada religión. El elegir ante crudas disyuntivas. La transformación en calculadora humana contando cada euro, restando, sumando, más bien restando que sumando...y muchas más impresiones, de las cuales, algunas se pueden estampar en este blog y posiblemente otras no. Una percepción única es esta y la he intentado plasmar lo más fiel posible en este blog para vosotros y por y para mí.
En definitiva, aquí os muestro esta canción (Acuarela de Toquinho) que describe mis creencias y mi representación con gran exactitud.
Un Abrazo fuerte. Gracias.
Haifa
En los mapas del cielo, el sol siempre es amarillo
y la lluvia o las nubes no pueden velar tanto brillo
ni los árboles nunca podrán ocultar el camino,
de la luz hacia el bosque profundo de nuestro destino.
Esa hierba tan verde, se ve como un manto lejano,
que no puede escapar, que se puede alcanzar, sólo con volar.
Siete mares he surcado, siete mares color azul,
yo soy nave, voy navegando, y mi vela eres tú...
Bajo el agua veo peces de colores,
van donde quieren, no los mandas tú...
Por el cielo, va cruzando, por el cielo color azul,
un avión que vuela alto, diez mil metros de altitud,
desde tierra lo saludan con las manos,
se va alejando, no se dónde va, no se dónde va...
Sobre un tramo de vía, cruzando un paisaje de ensueño,
en un tren que me lleva de nuevo a ser muy pequeño,
de una América a otra, tan sólo es cuestión de un segundo,
basta con desearlo y podrás recorrer todo el mundo...
Un muchacho que trepa, que trepa en lo alto de un muro,
si se siente seguro, verá su futuro con claridad...
Y el futuro, es una nave, que por el cielo volará,
a Saturno, después a Marte, nadie sabe dónde llegará,
si le ves venir, si te trae amores, no te los robes sin apurar.
Aprovecha, los mejores, que después no volverán.
La esperanza, jamás se pierde, los malos tiempos pasarán,
piensa que el futuro es una acuarela y tu vida un lienzo,
que colorear, que colorear...
En los mapas del cielo el sol siempre es amarillo
(tú lo pintarás)
y la lluvia o las nubes no pueden velar tanto brillo
(tú lo pintarás)
basta aún desearlo y podrá recorrer todo el mundo
(tú lo pintarás)